Cita bíblica: Santiago 1:6-8

Introducción:

En la primera parte de este tema vemos como el Espíritu Santo nos exhorta una vez más a buscar la sabiduría. Y nos habla de que Dios da sin reproche, esto quiere decir que se complace en darla a sus hijos. Veamos que sigue…

Cuerpo:

Siguiendo con el tema de la Sabiduría, explícitamente el ‘pedirle sabiduría a Dios’; ahora este pasaje nos habla de que debemos pedir con Fe.

V6. Por qué Santiago hace énfasis en pedir con fe? = porque en esto no hay duda alguna ni confusión de que Dios quiere darnos de su conocimiento… Dios quiere que busquemos la sabiduría y que la encontremos.

V7. Este verso, nos sigue hablando en contexto sobre pedir sabiduría; pero nos amplía un poco más el conocimiento sobre el poder de Dios y nuestras peticiones. Claramente dice que sin fe o dudando, no se recibirá cosa alguna del Señor, esto es un tesoro que también debemos guardar.

Ejemplo: Cuando usted tiene que hacer un mandado administrativo, por ejemplo, sacar un documento. Usted va directamente a la oficina correspondiente a que le digan que hacer; usted hace el proceso que se le pide sabiendo (con conocimiento) que es parte de lo necesario para obtener ese documento. Usted no duda de la autoridad que tiene el oficial de turno para entregarle el documento que usted necesita una vez usted tenga todo listo.

Ahora, porque dudamos de Dios? – esa es la pregunta que debemos corregir en nuestros pensamientos y nuestro corazón. Dudar que Dios pueda hacer algo es faltarle al respeto; pero también lo es pensar que Dios está obligado a darnos todo lo que pidamos. El balance es ‘confiar que Dios puede hacerlo todo, y que cuando no se den las cosas, confiar en la sabiduría de Dios’. De igual manera, la confianza está en reconocer la autoridad divina de nuestro Señor Jesús.

Cuando uno pide sabiduría, el Señor le otorga a uno el conocimiento del porqué algo sucede o no. Cuando dejamos actuar a Dios en nuestras vidas, muchas veces su sabiduría nos dice que algo estamos haciendo mal, o incorrectamente y nos da la oportunidad de corregirlo. Ahí actúa la sabiduría de Dios en la disciplina de sus hijos. El castigo temprano incomoda pero no deja heridas, pero cuando se acumula y no se corrige a tiempo, entonces se convierte en una herida dolorosa y una cicatriz profunda.

V8. Aquí el Señor nos exhorta a confiar en Dios y tener fe pase lo que pase. Nuestra fe, nuestro ánimo no debe estar ligado a las circunstancias, sino todo lo contrario. Nuestro ánimo de confiar en el Señor debe ser día a día, momento a momento. El ánimo es suyo, no usted de el.

Ejemplo: Enojarse porque las cosas no salen como usted quiere, es un ánimo incorrecto. El que confía en el Señor, puede enojarse en el momento (y ojalá nunca), pero hay que sacudirse el ánimo incorrecto inmediatamente. Esto incluye dejarse llevar por la pereza, por la tristeza, por la desesperanza, etc.

Conclusión:

¿Qué pues hacer?

“El principio de la sabiduría es el temor de Jehová;
Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza”. –Proverbios 1:7

Obedezcamos a Dios, hagamos su voluntad, la cual es tener una relación íntima con él; buscándole a toda hora y a todo momento.

Este blog es una extensión de mensajes a Europa y el Reino Unido del ministerio Retornando a las Escrituras.